sábado, 9 de marzo de 2013

Induciendo a la sociopatía: Fauna de supermercado.

Hoy, por si alguien no se ha percatado, es sábado. Eso en mi casa significa "día de la compra".
Sí, amigos, hacer la compra. Esa noble y ancestral tradición consistente en entrar a un establecimiento -generalmente- lleno de gente, agenciarte un vehículo de cuatro ruedas no motorizado y enzarzarte en un trepidante derby de demolición con el objetivo de llenar el carro de objetos varios y salir del establecimiento cuanto antes y con el menor número de bajas.

Porque sí, la gente va al supermercado como el que va a los autos de choque: A evitar que el resto circulen y chocarte con todo lo vivo.
Pero la cosa no queda ahí, como en todo ecosistema, la fauna es variada y no todos los especímenes hallados en un mismo supermercado ejercen la misma función. Aquí van los principales grupos de individuos dedicados a atormentar a sus conciudadanos:

· Los tertulianos con complejo de barrera de acceso: Són un grupo de personas que han decidido que un pasillo de supermercado es el mejor sitio donde detenerse a hablar con los amigos ocupando el mayor área posible. Pero ese no es su mejor punto. La parte divertida sucede si estás haciendo la compra con mas gente, ya que acostumbra a suceder que el primero del grupo de peatones pide paso, y los tertulianos -cual torniquete/barrera de acceso al metro- dejan pasar a esa persona, pero vuelven rápidamente a su posición original, impidiendo así el paso al segundo peatón, que deberá pedir permiso para pasar, repitiéndose así el mismo proceso una y otra y otra Y OTRAS MIL VECES hasta que nadie mas necesite pasar. Será entonces cuando un integrante del grupo de tertulianos diga "Chicos, mejor nos movemos que aquí molestamos" y el grupo quedará disuelto.

· La señora del rebufo: Esa señora que, como si se tratara de un coche de carreras cogiendo el rebufo al de delante para acelerar por encima de sus posiblidades, aparecerá de ningún lugar a una velocidad sobrehumana y se colocará delante de tu carro, y entonces reducirá la velocidad hasta llegar a la marcha de señora mayor. Llegados a este punto, este especimen puede actuar de tres formas distintas. La primera -si tienes suerte- consistirá en cruzarse en tu camino e ir hacia un pasillo al que tú no te dirigías; la segunda y mas común consistirá en circular hacia tu misma dirección, pero mucho mas despacio de lo que tú lo harías; la tercera y mas desesperante consistirá en ver como la amable señora se coloca delante tuyo para buscar algo en el estante, que vete tú a saber por qué, finalmente no encuentra y termina siguiendo su camino, siempre en la misma dirección que tú y mucho mas despacio.

· Tu rival del derby: Exacto, si llevas tú el carro de la compra, éste será tu archienemigo. Se trata de otro individuo, equipado con un carro de la compra, que por algún motivo que desconoces te tiene en el punto de mira. Este individuo circulará por el mismo pasillo que tú, en dirección opuesta y buscando la colisión como el que busca agua en el desierto. Porque da igual que te eches a un lado del pasillo; da igual que te pares para darle paso; da igual que te apuntes al programa de protección de testigos y te refugies en un autocaravana en Siberia; tu rival del derby te encontrará y embestirá tu carro con todas sus fuerzas.

Y si a estas alturas te preguntas: ¿Cómo hago para evitar sufrir este infierno? Mi respuesta es: Búscate un carrito resistente y gana el Derby de Demolición.

2 comentarios:

  1. Dios que bueno xD y muy cierto todo, los que más me joden son los tertulianos.. Aunque también están los niños sin correa estorbando por todos lados y los padres sin decir nada

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  2. Por eso con más frecuencia me apunto a "la compra por internet" o buscar el horario en que el super parece un desierto. De otra forma ya me verás de mal humor el resto del día xD

    Una forma muy original de describirlo xD

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